lunes, 28 de febrero de 2011

ANNE BAXTER






Anne tenía un rostro que era todo dulzura, un rostro aniñado que transmitía inocencia y bondad…pero curiosamente los papeles que más popularidad le aportaron en el cine, fueron los de mujer mala y perversa. Anne, nos mostró en muchas de sus interpretaciones ,el feroz lobo que se escondía tras la piel del cordero de mirada cándida e ingenua.





Nació un 7 de Mayo de 1923 en Michigan City, Indiana, en el seno de una familia muy bien posicionada, por lo pasó su infancia rodeada de lujos, y de gente sofisticada. Sus padres , que eran grandes amantes del teatro, llevaron a Anne cuando sólo contaba con la edad de 10 años ,a ver una obra que se interpretaba en aquellos momentos en Broadway con gran éxito; la pequeña quedó impresionada, y aquí fue donde, a tan temprana edad, comenzó su vocación como actriz.
Fue a partir de éste episodio, cuando Anne se matriculó en una escuela de actuación , donde tuvo como maestra a una de las más afamadas profesoras de la época, ya que debido a la buena posición económica de la familia, podían acceder a las mejores escuelas.
Debutó en Broadway, a la temprana edad de 13 años,para seguidamente encaminar sus pasos hacia el cine. Se presentó a las pruebas solicitadas por Hichcock, para ser la protagonista de la oscarizada “Rebecca”, pero el director la desestimó por considerar su rostro demasiado aniñado e infantil, logrando éste papel finalmente Joan Fontaine.
Su debut cinematográfico se produjo con la película “Twenty Mule Team” (1940), pero no fue hasta que Orson Welles le dió la oportunidad de aparecer en “El cuarto mandamiento” (1942), cuando su nombre comenzó a sonar algo en la industria de Hollywood.Un año más tarde su carrera despegó considerablemente al aparecer en varias cintas, todas ellas de escasa relevancia, pero que contribuyeron favorablemente a potenciar su nombre, eso sí, principalmente como actriz secundaria. Sin embargo el año 1944, consolidaría su imagen frente a la crítica y el público, con títulos como “Eran cinco hermanos”, “La víspera de San Marcos” o “Semilla de odio”, película en la que ya nos mostró, al personaje de cara angelical, pero pérfido y malvado en su interior.




El año 1946 le trajo un Oscar, por su estupenda interpretación en el film “Al filo de la navaja”. Aunque su papel fue secundario y competía con una actriz principal maravillosa y bellísima, llamada Gene Tierney, Anne demostró que la belleza, aunque importante, pasó a un segundo plano comparada con su grandiosa interpretación que maravilló a la crítica , y como no al público, que inmediatamente situó a Anne en el lugar privilegiado que sin duda se merecía.



Continuó subiendo escalones en su imparable carrera, con un western llamado “Cielo Amarillo”(1948), dirigido por el gran William A. Wellman, y protagonizado junto a Gregory Peck o Richard Widmark; Anne estuvo magnífica, única… supo darle al papel, una categoría que lo hizo más grande, más imprescindible, para la composición final de una muy buena película.




Con el año 1950, llegaría uno de los papeles, por el que Anne sería eternamente recordada; éste sería el papel de Eva Harrington en la película “Eva al desnudo”. Fue dirigída por el gran Mankiewicz y compartió cartel con figuras de la talla de la gran Bette Davis, Celeste Holmes, George Sanders, o una principiante Marilyn Monroe. En ésta cinta nos demostró su enorme registro interpretativo, ya que en un principio y amparandose en su dulce apariencia, consiguió engañar a todos, para seguidamente mostrarnos su ambiciosa y maligna personalidad.
La película consiguió seis Oscars, seis nominaciones a los premios Bafta, y como no el reconocimiento a la genial Bette Davis ,con el Premio especial del jurado, en el Festival de Cannes a la mejor actriz. La cinta ha pasado a estar considerada como una de las mejores que se hizo nunca en el mundo del cine; para mi gusto una de las mejores películas que he visto en mucho tiempo, tanto por la interpretación sublime de la gran Bette Davis, la asombrosa dualidad que mostró Anne para darle vida a éste complejo papel , por el que incluso fue nominada a los Oscars, y el guión que te engancha desde el primer segundo en que aparece la película en pantalla.




Bajo mi punto de vista, ésta fue la película que le dió la oportunidad de demostrar al público, que los papeles secundarios ya le quedaban pequeños

En el año 1952 protagonizó una de las historias que conformaron una deliciosa y tierna película llamada “Cuatro páginas de la vida”. Un año después apareció de la mano del genial Fritz Lang en “Gardenia Azul”(1953), también éste mismo año tuvo la oportunidad de trabajar bajo la firma del maestro Alfred Hitchcock en el film “Yo confieso”, junto al atormentado, pero por otra parte magnífico Montgomery Clift.


En el año 1955 comparte protagonismo en una comedia romántica junto al galán Rock Hudson llamada “Su único deseo”, y un año después aparece como Nefertiti en una de las mejores películas bíblicas de todos los tiempos, llamada “Los Diez Mandamientos”(1956). Apareció junto a innumerables actores de prestigio como Charlton Heston, Yul Brinner, Edward G.Robinson o Ivonne de Carlo entre otros; Anne en su papel de ambiciosa esposa de Ramses II, y amante de Moises, estuvo grandiosa.



A finales de la década de los 50, apareció en un western llamado “La ley de los fuertes”( 1957), junto a Charlton Heston, y en una película de intriga cuyo título fue ” Sombras acusadoras”(1958).
Ya en los 60 rodó un estupendo western llamado “Cimarrón” (1960), dirigído por Anthony Mann, y junto a Glen Ford como co-protagonista. En el año 1962 protagonizó una película que no estuvo exenta de polémica ,y que escandalizó a buena parte del público de la época, al tratar un tema tan tabú como el lesbianismo.
Más o menos a mediados de los año 60, Anne fue espaciando sus apariciones en el cine, ya que las alternaba con la televisión, haciendo apariciones en series como “Batman”, donde apareció en dos capítulos como invitada especial, o en “Marcus Welby, doctor en medicina”(1969),serie que por cierto ,logró permanecer varios años en antena, debido a la gran popularidad que consiguió.
En los años 70, tuvo la oportunidad de interpretar en Broadway el papel que años antes había interpretado Bette Davis en “Eva al desnudo”. Estuvo fantástica como Margot Chaning, y la obra, que fue una adaptación musical de la película, tuvo una muy buena acogida entre el público.
En la década de los 80 apareció en la famosísima serie “Hotel”, como sustituta de Bette Davis.

Supo llevar muy discretamente su vida privada, por lo que, aunque se casó tres veces, la prensa supo respetar su intimidad.
De su primer matrimonio en los años 50 con John Hodiak , nació su primera hija Katrina; el matrimonio se disolvió en éste mismo decenio. Más tarde ya en lo 60 se casó con Randolph Galt, con el que tuvo dos hijos, aunque el matrimonio fue igual de corto que el primero. Se casó por tercera vez en el año 1977 con David Klee, siendo ésta unión la más corta de todas las que tuvo, ya que su marido murió de enfermedad tan sólo un año después de que se celebrara el matrimonio.
Ella murió un 12 de Diciembre de 1985 en Nueva York de un aneurisma cerebral, cuando paseaba por Madison Avenue.
Anne demostró a lo largo de toda su vida, sus ansías de superación y la ambición de ver reconocido su talento. Otras, en su acomodada situación, se hubieran conformado tal vez con ser una hija de papá; pero en el caso de ésta maravillosa actriz, fue diferente; ella apostó por un sueño…. con su sensibilidad y perseverancia pudo hacerlo real, y así consiguió vivir una vida plena…..consiguió vivir la vida que siempre quiso vivir desde aquel lejano día ,en el que con tan sólo 10 años y después de ver su primera obra de teatro, decidió que quería ser actriz.

lunes, 21 de febrero de 2011

IVONNE DE CARLO



Seguramente al escuchar el nombre de esta bellísima actriz, inmediatamente lo asociemos con un peculiar personaje que interpretó, allá por los años 60, en la mítica serie “La familia Monster”. Aunque la producción permaneció tan sólo dos años en televisión, le aportó más popularidad, que todos sus trabajos cinematográficos. La industria televisiva, introdujo a Ivonne en millones de hogares americanos, que acogieron con gran entusiasmo, esta novedosa producción y que hicieron de Ivonne una actriz muy querida.




Pero lo justo sería destacar, que la presencia de esta actriz fue también bastante relevante en el cine de los años 40 y 50, siendo considerada por muchos expertos, como una de las mujeres más bellas que apareció en la pantalla grande de esta época. Época en la que por cierto ,aún no existían los retoques fotográficos, y aún así ,tanto la fotografía, como el cine ,nos supieron deleitar con imágenes de mujeres de belleza natural y sin artificios; entre estas imágenes cautivadoras se encontraba, sin duda alguna, la de Ivonne de Carlo.

Margaret Yvonne Middleton, nació en Vancouver (Canadá), el 1 de Septiembre de 1922. Ivonne se crió en un ambiente de bastante pobreza, pues su padre abandonó el hogar familiar, cuando ella tan sólo era una niña. Ante ésta situación , su madre decidió trasladarse a Los Ángeles, donde veía más posibilidades de comenzar una nueva vida. Fue en ésta ciudad, donde Ivonne comenzó a trabajar en teatros locales, y clubs nocturnos, en los que manifestaba su gran talento para la danza, que por otra parte ya había sido constatado, cuando ella era tan sólo una niña.
Sus inicios en el cine comienzan sobre el año 1942, que fue cuando la contrató La Paramount, pero trás unos cuantos pequeños papeles, abandonó estos estudios para fichar con Universal. Con estos estudios protagonizó pequeños papeles, en películas como “Ruta a Marruecos”, o ” ¿Por quién doblan las campanas?” ,en ambas cintas apareció luciendo su exótica belleza y poco más.
La fama realmente le llegó con “Salomé, la embrujadora” (1945). El eje sobre el que se movió la película fue con certeza, la belleza de Ivonne; apareció sensual mostrándonos seductores y provocativos bailes, en los que movía sus redondeadas caderas, y deleitándonos con un rostro que rozaba la perfección….definitivamente “embrujó” al público, que inmediatamente demandó más apariciones de la actriz.



A partir de este gran éxito, Ivonne interviene en numerosas producciones abarcando todo tipo de géneros. En el año 1947 ,aparece junto al magnífico Burt Lancaster en un drama carcelario llamado “Fuerza bruta”, y un año después maravilla al público con su estupenda presencia en un film llamado “Casbah”, en la cual compartió protagonismo , entre otros, con Tony Martin.


En el año 1949, protagonizó “El abrazo de la muerte”; esta vez, apareció con un papel de mujer fatal, hermosa y cautivadora, la chica del gánster que se enamora de un hombre bueno, cuyo papel fue interpretado por Burt Lancaster.


Ya en los años 50 las películas de aventuras parece que son su fuerte, y aparece en varias cintas de este género, como por ejemplo “El capitán Panamá” (1952), junto a Rock Hudson, “Argelia”(1953), junto a Carlos Thompson, o “Los gavilanes del estrecho”(1953), de nuevo junto a Rock Hudson.
Posteriormente, deslumbra en una comedia llamada “El paraíso del capitán”(1953), junto al oscarizado actor Alec Guinnes
.
El western, también llamó a su puerta , pues protagonizó varias producciones entre las que cabe mencionar “Rio Fronterizo”(1954), “Passion” (1954) o “La pradera sangrienta”(1955).
En el año 1956, apareció en una superproducción llamada “Los diez mandamientos”. En ésta película épica le dio vida a Séfora, la mujer de Moises, siendo ésta interpretación la que ensalzaría algo su carrera, que por ésta época andaba algo perdida. Hoy en día, ésta interpretación es quizás por la que más se recuerda a Ivonne, en el mundo del cine.



En el año 1957 sorprendió al público con un melodrama llamado “La esclava libre”, en el que compartió trabajo con el Clark Gable.  Quizás ya estaba algo envejecido para éste tipo de papeles, pero de todas formas estuvo espléndido como en todas sus interpretaciones. La cinta recordó mucho a “Lo que el viento se llevó”, eso sí salvando las distancias; ni se contó con el mismo presupuesto, ni el guión fue todo lo bueno que tenía que haber sido. Aún así nos mostró de nuevo a una Ivonne hermosa hasta rabiar, unos vestuarios espléndidos, y fotografías pictóricas bellísimas. La cinta sin ser una obra maestra, conformó un resultado entretenido y digno de visionar.



Ya entrados los años 60, protagonizó un western, junto al gran John Wayne llamado “El gran McLintock” (1963), en el que apareció de secundaria, para seguidamente aparecer en una comedia junto a Bob Hop cuyo título fue “Un biberón en la ONU”.
Ambas apariciones, fueron bastantes decepcionantes , profesionalmente hablando, para Ivonne, y cuando ya sentía que su fama se apagaba, surgió la posibilidad de dar vida a un atípico personaje llamado Lily Monster.
La serie fue lanzada por la CBS, en el año 1964, justo una semana después de que otra productora, también americana, lanzara al mercado “La familia Adams”.
Ambas series alcanzaron una notable popularidad, y ambas llegaron a su fin casi al mismo tiempo. Aquí en España se hizo muy popular la protagonizada por Ivonne, al incluirla en un espacio dedicado a los adolescentes llamado “La Bola de Cristal”.
“La familia Monster”, contó con una maravillosa ambientación , una espléndida estética gótica, un caserón destartalado y tétrico ,una ”monstruosa familia”, que en realidad era totalmente inofensiva, y un guión brillante e inteligente, que hizo que la serie pasara a formar parte de historia de la televisión.
Para Ivonne éste papel, fue como un soplo de aire fresco en su carrera, que le aportó mucha popularidad, y que la hizo conocida también entre las generaciones más jóvenes, además demostró con creces, que la comedia estaba echa para ella.





Al finalizar la serie, la actriz apareció en varios musicales como “Pal Joey” y “Follies” (1974), que fue el que más prestigio le aportó, pues incluso fue merecedora del premio Tony.
En los años 70 y 8o protagonizó , varias producciones, casi todas de género fantástico o de terror, pero todas ellas de pésima calidad como “The Silent Scream” (1980), “Escóndete y tiembla”(1987) o “El morador de las tinieblas”(1988).
Su última aparición en el cine, se produjo al lado de Silvester Stallone, en la película “Oscar”(1991).

Respecto a su vida sentimental, Ivonne se casó solamente una vez y fue en el año 1955, con Bob Morgan, un doble de escenas de primera categoría, con el que tuvo dos hijos. Durante la filmación de una escena bastante peligrosa, pues se desarrollaba en las vías de un tren, su marido perdió una pierna ,e Ivonne se retiró por un tiempo del cine, para atenderlo exclusivamente a él. Al cabo de algún tiempo se divorciaron, concretamente en el año 1968.


En el año 1997, y tras el duro golpe que le trajo la vida, con la muerte de su hijo, Ivonne decidió ingresar voluntariamente en una comunidad de reposo . Un tiempo después, y debido a su delicada salud , ingresó en un centro hospitalario situado en California ,donde murió de una apoplejía, un 8 de Enero del año 2007.
Tal vez la imagen de Ivonne se infravaloró, al aceptar ésta, el papel de Lily Monster; puede ser que su imagen como actriz “seria”, se viera algo perjudicada, por este personaje,  pero sin duda, gracias a este entrañable papel, Ivonne se convirtió en una actriz reconocida por varias generaciones, que pudieron disfrutar de ésta original serie , igual o más que sus padres, y porque no, que hasta sus abuelos. Hoy en día su personaje de madre vampiresa en la serie, sigue siendo fuente de inspiración para numerosos disfraces góticos; la serie se ha convertido en una obra de culto ,que ha influido incluso en la estética, y el pensamiento de varias generaciones. No…., seguro que Ivonne al aceptar éste peculiar papel, no se imaginaba que 50 y tantos años después, la serie seguiría fascinando al público tal y como lo hizo la primera vez que apareció en la televisión.

sábado, 12 de febrero de 2011

LUPE VÉLEZ



Lupe casi era una niña cuando comenzó su exitosa carrera en Hollywood . A los 17 años cuando llegó a la ciudad de los sueños, era una bella jovencita ,con muchas ilusiones, y por encima de todo con mucho afán de triunfar en el cine. Consiguió hacer realidad muchas de sus aspiraciones ,pues logró convertirse de la noche a la mañana en una gran estrella, gracias a su belleza, y a un público que admiraba su gran personalidad. Su fuerte carácter, la llevó a tener una vida sentimental tormentosa, de la que por cierto, se hacían eco constantemente ,las revistas de la época.
Lo cierto es que un tiempo después de que llegara a Hollywood, poco quedaba de aquella jovencita humilde e ilusionada; a Lupe convertirse en diva le pasó una costosa factura… su propia vida.



María Guadalupe Villalobos Vélez, nació en San Luis Potosí, un 18 de Julio de 1908. Era hija de un general de la Revolución llamado Jacobo Villalobos, y una cantante de ópera llamada Josefina Vélez.
Con tan sólo 13 años, sus padres la enviaron a estudiar a un convento situado en la localidad de San Antonio (Texas), de donde salió algún tiempo después para ayudar a sus padres económicamente, trabajando de dependienta en una tienda.
Lupe compaginaba su trabajo con clases de baile, en las que podía manifestar su talento artístico, produciéndose su debut como bailarina en el año 1924 en el Teatro Nacional de México. Gracias a su gran expresividad, a su dinamismo y a su jovialidad, fue prontamente descubierta, por el mismo productor que años antes lo había hecho con Oliver Hardy y Stan Laurel (El gordo y el flaco). De ésta manera Lupe, pudo comenzar su paseo por Hollywood. Sus primeras apariciones se sitúan en cortos ,en los que apareció junto a éstos evocados cómicos.



Su primer papel relevante se produjo con un film llamado “El Gaucho”(1927), junto al galán Douglas Fairbanks. La película fue pensada exclusivamente para lucir a tan demandado galán, pero la sorpresa se produjo, cuando el público también quedó prendado de la belleza, y buen hacer de Lupe Vélez. Así su primera incursión en el cine, podríamos denominar serio, fue todo un éxito y la crítica alabó el trabajo de la actriz de forma muy provechosa; con una sola película quedó confirmada su categoría de estrella.




Un año después ,Lupe ya fue galardonada con el premio WAMPAS Baby Star, el cual era concedido anualmente a trece jóvenes actrices, por tener un panorama cinematográfico muy prometedor.
En el año 1929 protagonizó un film llamado “El cazador de tigres”, junto a Lon Chaney, y tan sólo una año después apareció en “The Storm”, una película dirigida por William Willer, que fue uno de los directores más prolíficos y admirados del cine estadounidense.
Participó en un western que se llamó “El prófugo”(1931), donde trabajó bajó la firma del exitoso Cecil B. DeMille , actuando un año después en una comedia llamada “American Bluff”(1932).
Con la llegada del cine sonoro ,Lupe también protagonizó títulos de calidad, que fueron engrosando su imagen de estrella, pero aproximadamente a mitad de los años 30, Lupe decidió cambiar Hollywood por Broadway, donde participó en varios musicales.
En el año 1938 fue demandada desde México para rodar “La Zandunga”, al lado de Arturo Córdova. En el año 1943 daría vida a una cortesana en la película “Nana” , basada en la obra de Émile Zola. Estos proyectos contribuyeron a agrandar su imagen también en su tierra natal.



Su carrera fue prolífica e importante, pero desde un principio, se le asignaron papeles que no pasaban de mostrar una imagen de mujer apasionada, bella y ardiente. Éste hecho fue preocupando con el paso de los años a Lupe, pues la belleza era efímera, y muchas veces se atormentaba pensando que sería de ella, cuando ésta desapareciera.
Lupe intentó desesperadamente ser feliz, en su vida privada, y aunque oportunidades de hacerlo, no le faltaron, su carácter rebelde e irascible siempre acabó destrozando las relaciones. Por cierto , debido a su peculiar carácter Lupe también llegó a ser conocida con el mote de “La Chinampina Mexicana”, que viene a ser algo sí como la explosiva mexicana.
Parece ser que anduvo locamente enamorada de Gary Cooper, con el mantuvo un idilio de dos años. El romance terminó ,por que las peleas entre ambos, eran tan sonadas, que incluso los estudios para los que trabajaba Gary en aquellos tiempos, decidieron mandarlo por un tiempo a Europa ,ya que no podían permitir que la carrera del actor se viera perjudicada seriamente por tales escándalos. Gary influenciado por los estudios de cine, y también por su madre, que llegó a tomar cartas en el asunto, decidió abandonarla, dejando a Lupe profundamente dolida.



Más tarde conocería a Johnny Weismuller, el Tarzán más famoso de toda la historia del cine, con el que se casaría en el año 1933. Seguramente para Lupe, ésta sería una de las relaciones más importantes de su vida, ya que compartieron seis años juntos.
Johnny inmediatamente quedó prendado de tan vehemente mexicana, y mucha gente pensó que él se encargaría de domar a tan fiera mujer….. pero se equivocaron completamente en sus teorías. Aunque Johnny fue unos de los hombres que más la quiso, Lupe convertía la cotidianidad en un infierno; muchos fueron los que presenciaron sus enormes enfados, y sin duda alguna era Lupe la que manifestaba su contrariedad con más violencia. El la amaba incondicionalmente, pero Hollywood había convertido a Lupe en una niña malcriada y egoísta, que siempre tenía que conseguir sus propósitos…y es que la fama se apoderó de Lupe quizás con demasiada prontitud.
Las continuas peleas de la pareja, que en los tiempos finales de la relación se producían incluso en público, desembocaron en divorcio seis años después.





Este hecho no fue ni mucho menos determinante para que Lupe se planteara un giro radical en su vida, y continuó jugando al juego del amor con numerosos amantes, que terminaban abandonándola hastiados de su peculiar carácter. Su vida pasó a formar parte de la prensa rosa de la época, donde se contaban con pelos y señales, sus amores y desamores. Ésta situación perjudicó seriamente su popularidad, y su fama se resintió gravemente. Hollywood y el público, fueron olvidando a Lupe, y posaron sus ojos en nuevas caras, de actrices jóvenes y maravillosas.

Su último amor, fue un actor austriaco llamado Harald Ramond. Lupe quedó embaraza, y le propuso matrimonio, pero ante la negativa de éste la actriz entró en una enorme depresión de la que no pudo salir. Sola, y lejos ya de la fama que en su día tuvo, Lupe decidió protagonizar su último papel. Un papel dirigido por ella misma, en la que sería la protagonista absoluta….preparó su propia muerte con una precisión estremecedora. Su última noche quiso que fuera especial, por lo que invitó a dos de sus mejores amigas a que pasaran la velada con ella; cenaron, charlaron, rieron, consumieron grandes cantidades de alcohol y acabaron la noche alegremente. Cuando Lupe regresó a su casa ya lo tenía todo preparado. Había decorado su habitación con incontables velas encendidas, y cientos de ramos de flores. Se maquilló, se desnudó y se tendió sobre la cama, rodeada de pétalos de flores, su muerte tenía que ser ante todo una muerte de estrella…de diva…algo que jamás la gente olvidara. Se tomó un frasco entero de pastillas, y esperó a que se produjera el óbito. Pero…¡pobre Lupe!, al momento se dio cuenta de que las cosas no iban a salir como ella había imaginado. Comenzó a sentir nauseas, debido a la cantidad de alcohol y alimentos ingeridos en la cena, y dando algún que otro traspiés, consiguió llegar al cuarto de baño donde resbaló, debido a su estado, golpeándose la cabeza contra el inodoro. Allí acabó su vida. Al día siguiente la encontró su criada con la cabeza introducida dentro de la taza y desfigurada por el golpe.

Se que puede parecer altamente morbosa la manera de describir su suicidio, pero si lo he hecho así, únicamente es para demostrar lo difícil que puede ser a veces convertirse en una estrella.

A tantas otras les sucedió lo mismo que a Lupe. Chicas anónimas,  de origen humilde que tan sólo contaban con su belleza, y unas enormes ganas de recibir atención y consideración. El mundo artificioso de Hollywood las obligó a desempeñar un papel, que algunas no pudieron separar de la realidad, llevando su estigma de Diva hasta las últimas consecuencias. Aunque lo irónico de todo este trágico suceso, es que Lupe consiguió por mucho tiempo acaparar portadas de revistas, tanto en EEUU, como en México, donde se detallaba paso por paso su espantosa muerte.
Murió un 14 de Diciembre de 1944, con tan sólo 36 años. Sus restos mortales se encuentran enterrados en el Panteón Civil de Dolores (México), en una sección reservada para artistas mexicanos.



jueves, 3 de febrero de 2011

DOLORES DEL RIO






Dolores fue la primera mujer latina que triunfó en el hermético mundo de Hollywood, convirtiéndose en la primera gran estrella mexicana que conquistó la meca del cine. Paseó su exótica belleza por numerosas películas, convirtiéndose en toda una celebridad. Sus éxitos durante su estancia en Hollywood ,se produjeron sobre todo en películas de cine mudo, protagonizando más tarde algunas en el cine sonoro. Pero donde triunfó realmente Dolores, fue en su tierra natal. Cuando volvió de nuevo a México, ya que su fama había entrado en declive, comenzó una exitosa carrera, y logró un apoyo incondicional del público, que la acogió con los brazos abiertos. Dolores ,fue la primera diva de la historia del cine mexicano.



Dolores nació un 3 de Agosto de 1904 en Durango (México). Fue hija única ,por lo que sus padres, que estaban muy bien posicionados socialmente, le dieron a la pequeña, la mejor educación posible, y una infancia muy feliz que años más tarde Dolores recordaría con nostalgia.
Al estallar la revolución mexicana, la familia tuvo que emigrar debido a la persecución que sufrían las familias de clase acomodada ,fijando su residencia Dolores y su madre en Nuevo México. Su madre matriculó a la pequeña en una prestigiosa escuela, donde ya comenzó a dar muestras de sus grandes dotes para el baile. Era tal su gracia, que algunas veces bailaba ante algunos amigos de sus padres, todos ellos de un estatus social bastante relevante, siendo precisamente en una obra benéfica , donde conocería a su primer marido Jaime Martinez del Rio.
Se casaron en el año 1921, y el matrimonio formado con éste rico heredero, le permitió a Dolores viajar, como regalo de luna de miel , por toda Europa, donde se codeó incluso con la realeza española.

En una fiesta organizada por la familia de su marido, Dolores tuvo la oportunidad de conocer a un famoso productor , que inmediatamente quedó prendado de ella, y que amablemente invitó al matrimonio a viajar a Hollywood.
De la mano de Carewe, así se llamaba el productor, tanto Dolores como su marido Jaime se adentraron en el mundo del cine. Lo primero que hizo Dolores, fue aprender algo de inglés y de actuación, mientras, su marido hacía alguna que otra incursión en guiones de los que no obtenía ningún resultado.
Su debut se produjo con la película “Joanna” (1925), que pasó desapercibida para el público. Pero a partir de una inteligente promoción, por parte de Carewe, pudo interpretar un papel en un film llamado ” El precio de la gloria”, que fue el que realmente la hizo popular, y con el cual obtuvo un gran éxito.

Trás lograr el reconocimiento esperado, Dolores continuó con títulos muy interesantes como “Ramona”, ”Los amores de Carmen”, ”Evangelina”, ”Ave del paraíso”, “Volando a Rio”,” Madame Dubarry” o “Resurrección” entre otras ,pues desde el año en que se produjo su debut en Hollywood ,hasta el año 1941 en que protagonizó una de las que sería de las últimas filmadas en EEUU, participó concretamente en 29 producciones.




En el transcurso de todos estos años Dolores afianzó su fama relacionándose con actrices y actores de mucho peso en Hollywood, como fueron Rodolfo Valentino, Marlene Dietrich, Charlie Chaplin, Ramón Novarro o Mary Pikford.


Por cierto Ramón Novarro y Dolores eran primos, aunque no se conocieron hasta que ella se hizo popular en Hollywood.
Mientras rodaba la película “Ramona”, en plenas mieles del éxito, su marido decidió emigrar a Berlín, desilusionado por su fracaso como guionista, donde murió en el año 1929.




Con la llegada del cine sonoro Dolores ya se había convertido en un estrella, y lo más curioso es que la industria, no la encasilló en papeles étnicos que eran los que frecuentemente terminaban representando los actores hispanos, tal vez debido a su procedencia aristocrática; por ejemplo no le pasó lo mismo a Lupe Vélez, ya que su imagen de mexicana explosiva, le limitó mucho sus papeles, y su prestigio.

Cuando la popularidad de Dolores en Hollywood, comenzó poco a poco a decaer, ésta decidió volver a México, sin saber que allí también la esperaba una carrera exitosa.
Su primera incursión en el cine mexicano, se produjo con un film llamado “Flor Silvestre”(1943). La película dirigída por Emilio Fernández , y co-protagonizada por Pedro Armendáriz, se convirtió en un gran éxito de taquilla, y hoy en día está considerada como una de las cintas más bellas, que jamás se filmara en el cine mexicano.




En el mismo año de 1943 ,rodó otro film llamado “María Candelaria”, dirigida por el mismo director que con la primera, y compartiendo protagonismo de nuevo con Pedro Armendáriz. Se cuenta que Dolores no estaba muy convencida de su aparición es ésta película, debido a la mala relación que surgió , entre ella y su director Emilio Fernández al rodar “Flor Silvestre”, ya que en varias ocasiones el director se había mostrado algo violento en sus formas, y Dolores que ya era toda una estrella consagrada, se negaba a pasar por tal humillación.
Pero el director consciente de que la necesitaba como actriz, y de que empezaba a estimarla como mujer, decidió regalarle el día del cumpleaños de la actriz, el guión de la que dijo sería su próxima película, que para más satisfacción había sido expresamente escrita para ella.
De nuevo la película, supuso un nuevo éxito en su carrera, y siguió triunfando con títulos como “Las abandonadas”, “La selva de fuego”,”La casa chica”,”La Malquerida” “Deseada”, “Doña Perfecta” o “La cucaracha” , entre otras, que la conviertieron en un monstruo sagrado del cine nacional.
Durante ésta etapa, Dolores intervino en alguna producción internacional como en “El Fugitivo” de John Ford, y con compañeros de reparto como el gran Henry Fonda ,y el viril y legendario Pedro Armendáriz, también en varias producciones españolas como “Señora Ama” y “La Dama de Alba”.

En el año 1954, le surgió un proyecto junto a Spencer Tracy, en un film llamado “Broken Lace”, pero le fue negado el visado americáno ,por considerarla el gobierno, simpatizante con el comunismo, parece ser por la relación que mantenía con Orson Wells. A pesar de éste suceso volvió a Hollywood en el año 1960 para rodar una película llamada “Estrella de Fuego”, junto a Elvis Presley, en la que desempeñaba el papel de madre de tan mítico cantante.También rodó de nuevo junto a John Ford, “El Ocaso de los Cheyenne”.
Su última aparición en el cine se produjo con una cinta llamada “Los hijos de Sanchez”, compartiendo protagonisno con Anthony Queen y Lucía Mendez.
Su vida privada, nunca formó parte de su vida pública, ya que Dolores ante todo quiso preservarla de la prensa.
Se casó por segunda vez con un director artístico de la Metro, llamado Cedric Gibbons. Por él ,se transformó en una mujer más sofisticada y más glamourosa. Pero en el camino del matrimonio se interpuso un genio llamado Orson Welles, que fue el culpable de su divorcio; más tarde ,Welles abandonaría a Dolores por Rita Hayworth



Cuando volvió a México se la relacionó con Emilio Fernández, el director de “Flor Silvestre”, con Tito Junco y con un torero español llamado Rafael Ortega. No volvió a casarse hasta que conoció a Lewis Riley, con el que permaneció hasta su muerte, que se produjo en el año 1983, por problemas hepáticos a la edad de 79 años.
La mayor preocupación que tuvo Dolores, a lo largo de su existencia, fue la de dejar una imagen limpia de su vida; tanto de la pública como de la privada. Lo consiguió con creces. Se convirtió con el paso de los años, en un mito del cine. Fue una excelente actriz, y además bellísima. El famoso escritor mexicano Carlos Fuentes ,la describió de la siguiente manera: ” El rostro es el sexo. Dolores del Rio, no necesitó desnudarse de la ropa para aparecer desnuda, le bastó abandonar el velo. Desnudez erótica de un rostro cuya sensualidad es la verdadera, la mental, la imaginaria, la sospechada, la deseada…”
Fue la primera mujer mexicana, que rompió sus cadenas; se liberó de un mundo oprimente, como era el de la alta sociedad en que ella se desenvolvía.Se arriesgó y fue valiente, incluso algo temeraria, pero vivió innumerables experiencias, que seguro no hubiera vivido, si se hubiera limitado a desempeñar un papel que desde su nacimiento tenía asignado.
Ella misma, en un homenaje, que le hicieron poco antes de su muerte, se pronunció así sobre su vida: “Por encima de las penas y las alegrías, que haya podido depararme la vida, pienso que lo esencial para mí, fue haber sabido encontrar un sentido a mi vida, y haberme entregado a él, sin reservas y plenamente.”


martes, 1 de febrero de 2011

CLAUDIA CARDINALE




Esta bellísima mujer se convirtió en una verdadera actriz, cuando Visconti y Fellini, le dieron la inigualable oportunidad de aparecer en películas de la categoría de “Rocco y sus hermanos”(1960), o “El Gatopardo”.

La realidad es que el mundo del cine nunca le interesó demasiado, pero éste parecía llamar a su puerta una y otra vez insistentemente, y finalmente no pudo rechazar tan suculento manjar .Como ella misma declaró una vez: “En el cine, siempre he utilizado la misma estrategía que con los hombres:decir no y no , pero siempre volvían a insistir.”

Trabajó con prestigiosos directores, y con no menos prestigiosos actores.  Burt Lancaster, Paul Newman ,Steve MacQuenn o Alain Delon , fueron algunos de los que cayeron rendidos a sus pies. De todos ellos el que más admiración despertó en Claudia fue Burt Lancaster del que llegó a decir : "Cuando se presentó para rodar sus escenas en el ” Gatopardo” era un auténtico cowboy, minutos después, al empezar a filmar la cámara, ya se había convertido en un auténtico siciliano."

Sus primeros papeles nos la presentaron como una muchachita algo sosa, y quizás demasiado dulce. Pero cuando Claudia se desató y nos mostró sus numerosos encantos, que por otra parte no tenían nada que envidiar a los de Sofía o los de Gina, nos dimos cuenta de que tras su angelical apariencia ,había escondida una de las más perfectas magiorattas del cine italiano.





Claudia nació con el nombre de Claude Josephine Rose Cardinale, en la ciudad de Túnez(Italia),el 15 de Abril de 1938.Sus padres eran inmigrates sicilianos, y contaban, aparte de Claudia, con 7 hijos más, por cierto todos varones.
Como casi todas las italianas de la época, su entrada en el cine se produjo cuando ganó un concurso de belleza en su ciudad natal, que le dió la oportunidad de viajar al Festival de Cine de Venecia, para tiempo después viajar a Roma y matricularse en unos cursos del Centro Sperimentale.
Su debut cinematográfico se produce con el film “Goha”, y éste mismo año protagoniza una excelente comedia llamada “Rufufú”(1958). Protagonizada por actores de la talla de Vitorio Gasman o Marcelo Mastroiani, y dirigida por Mario Monicelli, ha pasado a ser considerada como una de las mejores comedias que se rodaron en Italia ,y fuera de Italia, en aquella época que tantos buenos guionistas y directores nos dejó.



Por cierto dos años después se rodó una secuela llamada “Rufufú, da el golpe”(1960),en la que esta vez no aparecía Mastroianni y que conformó una estimable obra, aunque algo inferior a la primera, siendo ésta predecesora de una rodada en el año 1985 y que se llamó “Rufufú, 20 años después”.
El año 1960 fue el elegido por el gran Visconti para rodar “Rocco y sus hermanos”.
La película considerada una obra maestra del neorrealismo italiano, contó con la presencia del guapísimo y jovensísimo Alain Delon, que le dio vida magníficamente al personaje principal del drama.



En ” El Gatopardo” (1963), compartió cartel con Alain Delon, y con el magnífico Burt Lancaster. Bajo la firma de Luchino Visconti se consiguió rodar una película, que fue obra clave de los años 60, logrando su director que su obra fuera una de las más alabadas de toda su extensa carrera. Claudia por su parte, aparece en la plenitud de su belleza, aunque en un papel secundario, al igual que Alain Delon, siendo el protagonista absoluto Burt Lancaster, que eclipsó a todo aquél que compartió escena con él.







En el año 1964 fue compañera de dos figuras ya consagradas en la película “El fabuloso mundo del circo”. Rita Haywort y John Wayne, engrandecieron el nombre de Claudia, al compartir trabajo con ella en esta producción dramática, entretenida y bastante bien lograda.
El mismo año participó en una comedia ingeniosa e innovadora, pues con ella nacería un prototipo de inspector de polícia muy particular: el inspector Closeau.
La película llamada “La pantera rosa”, lanzó a la fama mundial a su protagonista Peter Sellers, y como no a los dibujos animados, que fueron los que dieron nombre a éste film. Claudia aparecía bellísima y radiante, y al ser tal el éxito de la cinta, posteriormente se rodaron varias secuelas, todas ellas igual o más divertidas que la primera.





Sin duda el año 1964 fue uno de los mejores de Claudia, pues también protagonizó una comedia típicamente italiana llamada, “Celos a la italiana”, donde pudo lucir toda su hermosura, apareciendo deslumbrante en una secuencia en concreto donde lucía un maravilloso vestido negro.
En 1965 apareció en un film dirigido por Visconti, que se llamó “Sandra”. En ella destacó poderosamente la fotografía, pensada exclusivamente para realzar, la ya de por sí magnífica belleza de Claudia.Éste mismo año aparecía de nuevo junto a Burt Lancaster en un western llamado “Los profesionales”(1965)



Fue en el año 1968 cuando protagonizó al lado de actores de la talla de Henry Fonda o Charles Bronson, otro western llamado “Hasta que llegó su hora”. La cinta dirigída por Sergio Leone se encuentra ,según los entendidos de éste género entre los cinco mejores westerns de todos los tiempos, y Henry Fonda logra una de sus mejores interpretaciones . Claudia en su papel de heroína del Oeste estuvo sencillamente grandiosa.



En el año 1971 participó de nuevo un western, pero esta vez al lado de una bomba sexual llamada Brigitte Bardot, y que se llamó “Las petroleras”.




En el año 1974 destacó poderosamente una película llamada “Confidencias”.Dirigída por Visconti ,de nuevo tuvo la oportunidad de trabajar junto al gran Burt Lancaster,compatiendotrabajo con otros “grandes”, como Silvana Mangano o Helmut Berger.
“Jesús de Nazaret”(1977), para mi gusto la mejor película religiosa de la historia del cine , la llevó a compartir cartel con un elenco de actores fabulosos; Robert Powell ,Anne Brancroft ,James Mason ,Laurence Olivier ,Anthony Quinn ,Fernando Rey o Peter Ustinov entre otros, hicieron posible el excelente resultado.Una de las mejores cintas sobre la vida de Jesús que se han rodado jamás, y con interpretaciones todas ellas fabulosas, compusieron una obra maestra muy recomendable. Cardinale interpretó el papel de mujer adúltera.





Ya en los años 80, concretamente en 1981 Liliana Cavani la dirige, junto a Burt Lancaster y Marcelo Mastroianni en “La piel”, un acertadísimo drama que se desarrolla en el contexto de la II guerra mundial. La directora Cavani aprovecha toda la crudeza de la guerra, para ofrecer imágenes estremecedoras e impactantes.
Un año después aparece en una película alemana llamada “Fitzcarraldo”, al lado del peculiar Klaus Kinski. Una obra pensada y diseñada esencialmente para los más soñadores … para los que aún tienen algo de fe en el género humano y piensan que nada es una utopía ,que todo se puede conseguir, por muy disparatado que parezca.







En “Enrique IV”(1984), aparece de nuevo junto a Mastroiani, que por cierto realiza una de sus mejores interpretaciones.
En los años 90 protagoniza varios títulos como “Calle Paraíso 588″(1992),”El hijo de la Pantera Rosa”(1993), destacando por encima de todas ellas “Un verano en la Goulette”(1995), o un documental llamado “Enemigos intimos”(1999).
Su última aparición en el cine se produjo en el año 2010 con “Un balcón sobre el mar”.
En el extenso currículum de Claudia, aparecen muchos más títulos. Yo simplemente he querido realizar un pequeño homenaje a ésta excepcional mujer, seleccionando los que para mi gusto fueron los más señalados de toda su carrera.Nunca quiso trabajar en el cine americano, aunque propuestas no le faltaron, ya que no quería separarse de su vieja y querida Europa, pero aún así logró convertirse en todo un mito mundial.

Por otra parte su vida privada, fue bastante discreta. Se casó sólo una vez con Franco Cristaldi. Después conoció al director de cine Pasquale Squitieri, con el que convivió hasta hace poco, ya que hoy en día se encuentra sola, pero no por ello aislada del mundo. Se cuenta que el primero de sus hijos llamado Patrick fue fruto de una violación que sufrió a la edad de 17 años. Su hija Claudia sin embargo fue fruto del amor con Squitieri.
Aunque ella nunca ha querido entrar en polémica se le han adjudicado numerosos romances, entre ellos el más sonado el que la relacionó con el presidente francés Jacques Chirac.
Actualmente vive en París, y se dedica principalmente, a parte de sus breves apariciones en el cine, a temas humanitarios, y a involucrarse principalmente en temas relacionados con la mujer.
En el año 2010 concedió una entrevista en la que le preguntaban si tenía nostalgia de un pasado que nunca volvería, y ella contestó: “El pasado es maravilloso, pero es pasado y queda atrás. No volvería atrás ni siquiera un segundo.”
Ha sido una de las mujeres más bellas que nos brindó el cine, y aún así ha sabido envejecer con dignidad, sin miedo, sin aferrarse inutilmente a un pasado, que le ofreció estupendas oportunidades que supo aprovechar. Todas sus vivencias quedaran siempre en su recuerdo, pero su filosofía queda bien clara con sus declaraciones: lo importante es vivir el presente.





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